lunes, 14 de julio de 2008

Nadie sabe... nadie supo...

Un pequeño guiño para los viajeros del tiempo que vivieron, gozaron y se aterrorizaron con los radioteatros, principalmente con El Monje loco, El Siniestro Doctor Mortis y La Tercera oreja. Recuerdo que después de escuchar esos programas nadie se atrevía ir al baño...


4 comentarios:

Anónimo dijo...

Llegó... el momento !!de felicitar el talento y profesionalismo de mi primo Jorge a quien siempre admiré su inteligencia, te las mandaste con esta búsqueda primito.
Felicidades tambien al tio abuelo por esa belleza que es la Constanza Isidora (nieta de Luz Maria).

Don Pato dijo...

Gracias primita por las flores. No es pa'tanto... lo que pasa es me fascina la investigación.
Todavía no voy a conocer a Constanza Isidora. Espero ir esta semana a la casa de Lorenita con un "engañito" bajo el brazo.

Don Pato dijo...

Como información adicional les cuento que el personaje original de El Monje Loco era de Salvador Carrasco Radioteatro que se trasmitía a las 20:30 horas por "La Voz de La America Latina" desde Mexico en 1958.
Voz: Salvador Carrasco.

Jaime Bórquez dijo...

Este viejo don Topa no para de sorpreendernos con sus hallazgos, por algo le llamo don Scherlock... Eso de encontrar al Dr. Mortis, me cacho!!! Yo no lo escuchaba porque me recagaba de susto. Fui recontra miedoso durante practicamente todos los años que viví en Ruiz Tagle 157 ( suma 13...cacharon esa? Aunque no soy superticioso porque trae mala suerte...hehehehe...) Y mis hermanos deberán recordar que en esa casa sucedian cosas medio raras. Yo siempre sentí una presencia en sus salones, en sus piezas. No se si don Yope se va a recordar cuando reclamó que alguien habia dejado abierta la puerta del patio y se habia entrado el Terry, que justo se habia metido debajo de nuestras camas y metia bulla con sus patas( dormiamos en la pieza al lado del baño, esa que tenia el ojo de buey, recuerdan?) Creo recordar que don Yope le tiró unos zapatos por debajo, que fueron a dar al otro lado de las camas y asi nos dimos cuenta que no habia tal Terry debajo, que la puerta del patio estaba cerrada y amarrada con una correa vieja ( la recuerdan? Era de color café oscuro, de puro usada)
Y si yo me recuerdo perfectamente de ver un cura, el padre Guillermo creo, caminando al anochecer por el patio de nuestra casa, bendiciendo y rezando junto a mis viejos, mi abuelo y la tia Julia, mis hermanos con mayor razón se recordarán tambien de eso, que fue nada más y nada menos que un exorcismo en el 157 de Ruiz Tagle...