jueves, 31 de julio de 2008
Raulito, el niño feliz
Mackenzie
Constanza Isidora
Les presento mi sobrinita Lorenita, hija de mi hermana Luz María y don Cholu del Valle,mientras espera la llegada de su hermosa hijita.
Constanza Isidora, recién nacida duerme plácidamente
martes, 29 de julio de 2008
Encuentro con los primos
Don Pedro Segundo Bórquez Alfaro, acompañado por su hijo Jaime regresa a las tierras de su infancia, la localidad de Huilmo (comuna de Montepatria) en busca de sus raíces.
lunes, 28 de julio de 2008
La bolsa de papel
Resulta que en estos días, que se hacían interminables para nosotros, niños pequeños “atrapados” dentro de la casa, ocurría algo que nos alborotaba y alegraba infinitamente…
Acercándose la hora de once, sentíamos golpear la puerta … corríamos a abrir … y allí estaba en su bicicleta nuestro Tata sonriendo, un poco mojado y con las manos en la espalda, escondiendo algo…
Era una bolsa de papel con exquisitas y crujientes sopaipillas que la abueli había cocinado y él nos traía como hermoso regalo, luego se despedía y ni siquiera se quedaba a tomar onces.
domingo, 27 de julio de 2008
Noticias del día
Para aquellos que quieran enterarse de más detalles aquí va el link:
http://www.fotolog.com/sinergia
Un abrazo para don Rorro
Otra!!!
Un artículo de turismo sobre Tierra del Fuego escrito y fotografiado por don Mejai se publica hoy en en el suplemento Viajes de La Tercera.
Ideal para quienes gozan conociendo el mundo a través de una pluma ágil y entretenida como es la de este mopri trotamundos.
miércoles, 23 de julio de 2008
La disciplina de antaño
Mujer, nacida en el campo de Linderos, cerca de Buin y Paine. Su padre se llamaba José Dolores y su madre Delfina. Él se ganaba el sustento repartiendo leche en un carretón con unos tarros grandes y la mamá realizaba labores de casa, que no son pocas, hacía quesos, una tarea ardua y minuciosa y tal vez cuidaría su propia huerta.
La abueli, tenía una hermana, Ana, ( la abuela de ustedes chiquillos ) que en nuestra familia siempre fue conocida como Tae ( no tengo claro el origen del disminutivo).
Según su propio relato, la abueli siempre fue un tanto traviesa… o tal vez, un poco lenta en cumplir una orden, el asunto es que la mamá ( Delfina ) no hablaba dos veces … y cuando no era obedecida prontamente, tomaba “ la paleta” ( ver nota )… y con eso “ se las daba”… ¡ imagínense!
Como la abueli sabía “ la gestión”, al menor problema salía corriendo , tiraba la paleta arriba del techo y se encaramaba a un alto peral, de donde solo se bajaba cuando los ánimos se calmaran .
Por lo que ella contaba, la Tae no la acompañaba en estas escapadas y se quedaba “en tierra” “aguantando el chaparrón”.
Nota:
la paleta ( palo largo con que se revolvía la ropa blanca en un fondo, mientras se hervía, única forma de lograr la blancura y pulcritud en esos tiempos)
Aventuras de la abueli hay varias …más adelante enviaremos otras.
lunes, 21 de julio de 2008
Los Radioteatros 2
Mis distinguidos contertulios (asi saludaba el personaje de Residencial La Pichanga que era del Club Deportivo Universidad Catolica...), debo decirles que este lindo recuerdo de don Topa, que a su vez inspiró a don Yope, es un tremendo tema para recordar nuestra infancia. Y me inspira para partir contándoles que, hasta el dia de hoy, soy un fanático de la radio pero de esa que "me cuenta cosas". No quiero música, salvo que sea antigua, de mi niñez o de los tiempos de lolo, o sea mi radio, en Chile, practicamente tiene número fijo 102,1 Oasis. Curiosamente aqui en Brasil en ese mismo número descubrí una radio similar, que toca desde Brenda Lee a Beatles y Credence, por lo tanto es tambien mi segunda radio favorita, ya que la primera es la CBN, cuyo slogan es "la radio que toca noticias". Nada de musiquitas ni que ocho cuartos, quiero que me cuenten cosas...
Y los programas de música? "El calducho"? o ese otro con la Maria Pilar Larrain, donde contaban chismes de la farándula en un block que se llamaba Son rumores? "Coctel de estrellas", se llamaba...
Más de alguna vez fui al Cine Auditorium que creo era de la radio Del Pacifico, que quedaba en un pasaje entre Morandé y Bandera, a ver "Residencial La Pichanga" y me hubiese gustado ir a la Portales, a ver "La bandita de Firulete" o a entretenerme con Don Casiano Pelaez y Pelaez, el Amadeo ( personaje inolvidable de Sergio Silva) la señora Sinforosita, la Raca, el tío Livorio, el maestro Chasquilla, volver a escuchar "Soñar no cuesta nada" o "El correo de Mineria"!!!
Y recuerdo, claro, los que tanto don Yope como don Topa nombraron, "Los Ofensores", en la Agricultura, y la parodia "Los Ofendedores", de Jorge Romero, en la Portales. Y el "Portaleando la mañana"? Y la frasecita cantada "Radio Recreo que hora eeessss? Las 11 de la mañana... A toda hora Radio Recreo está con Usted...." Esa me recuerda mi casa papudana, con la mama Juana en pleno ajetreo para alimentar el ejército de cabros que éramos!!! Y tambien las veces que tuve la suerte de estar en el departamento de la tia Rochi y el tio Mario, en Recreo Alto! En la pieza del Maro habia una radio Zenith ma-ra-vi-llo-sa!!! Era como una radio de campaña militar. Algun día la encuentro por ahi en algún cachureo y, claro, la compro, meh que hueá!!!
La radio fue mi compañía. Y espero que la Tila se acuerde que me trajo una de Miami, era una Fiesta, radio pequeña a dos pilas, blanca con forro de plástico negro, que usé por años y que tiempo despues la vi en manos de Pablito Je-jé ( mi sobrino canadiense...) pero no sé si funcionaba. Recuerdo hasta el olor que tenia esa radio!!!
Un dia llegó la tele y la gente pasó a no imaginar más paisajes, personajes, escenarios, acciones. Ojalá vuelvan los radioteatros, como dice don Yope, son un estimulante poderoso para la imaginación.
Autor: Jaime Bórquez
sábado, 19 de julio de 2008
El Tata Manuel
Hombre de origen campesino, nacido en Linderos, cerca de Buin y Paine. A temprana edad murió su madre y él que aún no tenía edad para trabajar, quedó al cuidado de sus hermanos : Rosa, con sus descendientes en Melipilla actualmente, Ana y otros de los cuales los nombres han ido quedando en la nebulosa del tiempo.
También contaba que siempre andaba por ahí experimentando, usando herramientas, inventando cosas, a partir de la curiosidad propia de la niñez y de la infinita oportunidad que da la naturaleza al que la quiera observar y aprender de ella…
Más adelante, ya joven, conoció a la abueli, la cual lo aceptó como su esposo, se casaron y vivieron en un fundo donde el tata era “el llavero ”, cargo de gran responsabilidad ya que tenía a su cargo la entrega de herramientas a los demás trabajadores, tenían una casita y allí comenzaron su familia.
Unos señores, visitas “del patrón” al ver su responsabilidad y laboriosidad le dijeron que si alguna vez quería ir Santiago le darían trabajo allí… tiempo después el fundo cambio de dueño y Manuel Escobar y Teresa Caro decidieron buscar nuevos horizontes “en la capital” allí el tata trabajó y estudió con gran esfuerzo. Poco después llegó a la viña Valdivieso donde, Don Nicolás Valdivieso, dueño de allí, percibiría su deseo de aprender y luego comenzó a enseñarle el oficio de enólogo para lo cual él aportó sus dotes innatas. Fue un autodidacta realmente.
De su historia en Valdivieso ustedes conocen un poco… trabajó y vivió allí hasta su fallecimiento.
Este hombre de origen humilde, construyó su vida y su familia a fuerza de trabajo y gran empeño ; era un hombre agradecido de Dios .
En su actuar con los demás siempre primó el respeto y la honestidad, no en vano para sus conocidos era DON MANUEL …
Recuerdo a este querido caballero, vestido con terno y corbata, a diario, perfectamente afeitado y peinado. Y para salir … el infaltable sombrero y un pañuelo blanco en el bolsillo de la chaqueta “apenitas” asomado …
Son solo algunos pequeños datos sobre el querido tatita…
viernes, 18 de julio de 2008
Los Radioteatros
Había llegado la hora del radioteatro de la noche y junto a mis hermanas ya estábamos sentados alrededor de la fiel estufa a parafina que habitualmente estaba cercada por un secador de mimbre y cubierto con pañales, esos de género, con los cuales nos cubríamos las piernas para aprovechar el calorcito y contrarrestar los escalofríos que siempre circulaban por nuestras espaldas cuando escuchábamos las historias de suspenso de “La tercera oreja” y de El doctor Mortis. Terminábamos con tanto susto que como debíamos salir al patio para ir al baño antes de ir a la cama, nadie se atrevía ir primero a desafiar esa oscuridad maligna y aterradora que nos hacía tiritar, para luego correr a sumergirnos en el frio de las sábanas y allí tapados más arriba de las orejas seguir dándole vueltas a la historia, echando a correr la imaginación a raudales, porque así era en ese entonces nuestra entretención, sin televisión, sin multimedia. Los “efectos especiales” corrían por cuenta de uno no más….hasta que por fin lográbamos quedarnos dormidos…
Sin ninguna duda que escuchar radioteatros era una manera muy efectiva para desarrollar la imaginación porque, cuando nos permitían escuchar los programas de ultratumba, temblábabamos con la voz pastosa del relator, la música de suspenso, el ruido de oxidadas bisagras que chirriaban cuando se abría un ataúd, el aullido de lobos hambrientos, un galope solitario y el silbido del viento en medio de la noche, todo rematado por la carcajada espeluznante del satánico protagonista… por supuesto que nos cagábamos de susto.
La radio nos sumía en la intimidad casera, en un mundo puertas adentro, nos hacía interactuar como familia. “Imagino” a mis abuelos, a mi madre muy joven y sus hermanos, escuchando la radio allá en el pueblo de Carén rodeando un brasero en las noches frías, buscando calor con las manos, mirándose las caras, oliendo el aroma a eucalipto y ocasionalmente el de azúcar quemada, que mi abuela Carmela le iba tirando de vez en cuando a las brasas, para espantar los malos espíritus…
“Llega Radiotanda, si señor, llega la audición del buen humor, todo el que la escucha, si señor, ríe a carcajadas, oh, oh, oh …”…algo más o menos así, era el jingle con que se iniciaban las transmisiones diarias del popular programa que tenía como protagonista a la Desideria, la recordada actriz Anita González, una comediante como ninguna, con la genialidad de salirse, muchas veces, del libreto de manera natural, adecuada e hilarante, con la talla justa, en el momento preciso. Eran chistes frescos, de humor blanco que encantaban a todos.
También estaba “Residencial la Pichanga”, con las divertidas intrigas del ambiente futbolístico y “Hogar dulce hogar”, con la magazinesca vida de la pensión de don Celedonio Menares.
Es oportuno recordar, homenajear y agradecer a tantos actores que nos hicieron reír, llorar, asustarnos y darnos temas de conversación por muchos años: Anita González, Sergio Silva, Eduardo de Calixto, Jorge Romero “Firulete”, Arturo Moya Grau y tantos otros, que con geniales interpretaciones de personajes que dejaron grabados en nuestra memoria: La Desideria, Don Celedonio, El Pollito, El Tereso “zaz", don Gabito Serena, el Indio Malo, la Pelá, La Ronca, el Chaguito Morning y tantos otros que seguramente ustedes recordarán.
Un “cogollo” especial para el genial Juan Marino, creador y voz del Siniestro Doctor Mortis…
lunes, 14 de julio de 2008
Nadie sabe... nadie supo...
miércoles, 9 de julio de 2008
La franqueza de Pedrito
Es bueno comenzar relatando que por esos días estaban en pleno apogeo las “radio novelas” con historias de temas variados, incluso algunas de misterio… que estimulaban la imaginación de grandes y pequeños…
En ese instante … el terror se apoderó de él y comenzó a gritar a todo dar
Pedrito tenía por esos días , 4 o 5 años de edad …
Y ya era , franco y directo.
Relatada por Teresa Escobar Caro y recopilada por Marité Mota Escobar
lunes, 7 de julio de 2008
RuizTagle 157 y Federico Reich 138
Pedrito y Anamaría practicando el swing en el portón de salida a Federico Reich
En un principio mi hermanita no se metía mucho con ellos porque no habían niñas, su yunta era la Lucía, nuestra vecina. En cambio yo me hice amigo de un buen lote de ellos. Estaban: el Hernán y el ''Menyo'' (creo que se llamaba Patricio) Madariaga, casi frente al portón en la casa que pocos años más tarde fue domicilio de la familia Paredes; recuerdo claramente a esos dos hermanos que eran unos pequeños bandidos, no maldadosos sino traviesos. Cuando el ''Menyo'' hizo su Primera Comunión decía de él mismo que era el diablo vendiendo cruces. Al lado sur de ellos vivían el ''Tano'' y la ''Pacha'', dos casas más allá el ''Murruco'' y en la esquina de Coronel Souper, el ''Pollo'', que era un poco menor y nunca fue muy querido en el grupo. Hacia el norte no había niños, pero a veces nos juntábamos con un adulto joven, el ''Dari'', bueno para contar bromas e historias increíbles. En seguida vivía un joven trisómico llamado Sergio.
Por Ruiz Tagle hacia el norte, después de los Céspedes llegó a vivir la familia de don Sergio Rodríguez, quien con su esposa, la señora María, fueron los padrinos de Jaimito, hoy conocido como el Gran Don Mejai. Antes de ellos hubo otra familia, pero a penas me acuerdo de una de las damas que habitaban ahí, era la señorita Orieta, que vivía con su mamá y una hermana parece, pero no estoy seguro.
Tranvía Alameda
Creo que describir el interior de la casa y los cambios que fueron produciéndose, da para otro artículo que les propongo para una próxima entrega. Me queda mucho tema y no logro despegar de los años 1950-52.
martes, 1 de julio de 2008
Una tarde en Villa Acero
Es verdad que les dimos una verdadera sorpresa, pero fuimos cálidamente acogidos y agasajados con unas ricas onces.
Con mi primo Jaime Bórquez, don Mejai, habíamos estado viajando desde Santiago grabando en video y fotografiando el sur de Chile, un trabajo encargado por el Servicio Nacional de Turismo y no podíamos seguir de largo sin pasar a saludarlos y dejar un registro de nuestra visita.
Aquí van entonces algunas imágenes de ese significativo día.